La giró frente a él, la miró a los ojos y la besó.
La beso con todas sus fuerzas, como si del fin del mundo se tratara. Ella le siguió el juego, quizás fuese un error, pero no le importaba.
+¿Por qué me has besado?
-Y.. ¿Por qué no?
Y de nuevo, sus labios se unieron en uno solo.
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